Fibras vegetales
La cestería, una de las ramas artesanales más extendidas en todo el mundo. En México se basa en fibras vegetales como el ocoxal (agujas de pinos), jipijapa, tule, henequen, ixtle, palmas, agaves, lirios, carrizos etc…
Estos materiales se recolectan en zonas húmedas, orillas de lagos y campos y bosques, donde crecen en abundancia. Las fibras son maleables, ligeras y resistentes, lo que permite tejerlas en múltiples formas y grosores. Su apariencia natural, con tonos verdes, beige o dorados, aporta calidez y frescura. Tradicionalmente, la cestería se emplea en la elaboración de canastos, tortilleros, petates y objetos ceremoniales. Además de su utilidad práctica, representa vínculos con la vida agrícola y doméstica. En muchas comunidades, los objetos tejidos simbolizan abundancia, orden y cuidado del hogar, siendo parte esencial de la identidad cultural.
La cestería tiene sus orígenes en los tiempos prehispánicos, incluso antes de la cerámica y la domesticación del fuego. Existen multiples técnicas distintas de tejer y las únicas herramientas que se requieren de los dedos y en ocaciones ganchos y cuchillos.
Los tejidos pueden ser planos, como los tradicionales petates; redondos, como las canastas y sombreros; o incluso en formas espirales o tubulares. Algunas piezas destacan por un trabajo tan fino y apretado que llegan a parecer textiles. Entre los artefactos más populares de la cestería se encuentran los sopladores para avivar el fuego, los tortilleros y las bolsas, piezas que combinan funcionalidad y belleza.
Canastos de bejuco
Sierra Juárez, Oaxaca
Carrizo
Las manos que moldean carrizo en Oaxaca, creando piezas de identidad cultural.
Piezas disponibles
Cestería Rarámuri
Entre los rarámuri, la cestería se elabora con sotol y palmilla, creando canastos usados en la vida cotidiana. Más que objetos, son símbolos de identidad cultural y de una cosmovisión que integra naturaleza y comunidad.
Palma
La palma es una de las fibras más empleadas en la cestería mexicana, recolectada y trabajada tras un proceso de sancochado, secado y corte. Su resistencia y flexibilidad permiten crear canastos, sombreros y tortilleros.
Jonote
El jonote es una fibra de corteza que se obtiene de árboles de regiones húmedas. Ligero y flexible, se utiliza en cestería y cordelería. Su uso simboliza ingenio y aprovechamiento de los recursos locales, transmitiendo saberes comunitarios.
Carrizo
El carrizo, una caña delgada que crece en las orillas de ríos y humedales, se emplea en la elaboración de canastos, jaulas y objetos utilitarios. Su ligereza y facilidad de trenzado reflejan versatilidad y adaptación cultural.
Chuspata
La chuspata es un lirio acuático del lago de Pátzcuaro. Su recolección y secado permiten elaborar petates, tapetes y muebles ligeros. Entre los purépechas, la chuspata simboliza vínculo con el agua y la fertilidad de la tierra.
Sotol
El soto es una fibra vegetal semidesértica, resistente y duradera. Se emplea en la elaboración de cestos y sombreros, especialmente en comunidades del norte. Representa resiliencia frente a entornos áridos.